El día de las letras gallegas en el Melga y donación de la hogaza más grande del mundo

Con motivo del Día de las Letras Gallegas, ayer jueves el Museo Etnolúdico de Galicia (MELGA) de Ponteceso abrió, por segundo año consecutivo sus puertas, en horario interrumpido desde las 10,00 h. hasta las 20,00 h. Debido a la gran oferta de diversas actividades en la zona (feria medieval, Festiletras, teatro, conferencias, premios, etc), esperábamos que las visitan podrían ser numerosas, en cambio, la afluencia al mismo estuvo cercano a media centena de personas. Los visitantes que se acercaron al museo, pertenecían en su mayoría a la provincia coruñesa, concretamente a Santiago de Compostela (Bertamirans, Teo, Vedra), Ferrol (Cariño, Pontedeume, Redes) y de A Coruña (Culleredo, Cambre, Pastoriza, A Coruña). Los pequeños grupos, nunca alcanzaron  las 10 personas, eran exclusivamente de tipo familiar, bien padres con sus hijos o con los abuelos/as, que venían a pasar el día, recomendados por otras personas, para pasar una mañana o tarde divertida y lúdica.

La curiosidad de la jornada estuvo, en la donación que hizo al MELGA la Panadería “Toñito” Velo de Ponteceso, más conocida como “Forniños”, que a través de su hijo Antón, realizó la hogaza (bollo, rosca,molete) más grande del mundo, con un diámetro de un 1,15 m. y un peso de 15 kilos. En estos momentos ya se encuentra dentro de las vitrinas del museo en el apartado de juegos de locomoción gallegos. Como saben, existía en Galicia a finales del siglo XIX (1888) en la comarca de Tuy (Pontevedra), “la carrera de la hogaza” fiesta-romería en la que varios jóvenes se disputaban una carrera de velocidad corta (sobre los 60 metros aprox.) en forma de desafío o reto. Aquel que resultaba ser el vencedor, se le concedía como premio una hogaza de pan de trigo (en aquellas épocas solo había pan maíz (brona), con el peso y  diámetro que anteriormente hemos señalado. Debemos comentar que el director del MELGA allá por el año 1955, tuvo la suerte de ganar dicha carrera. Ahora, la dirección del propio museo está interesado en recuperar dicha modalidad atlética para nuestros jóvenes en los diferentes concursos festivos de juegos y deportes tradicionales gallegos.