Galego
La Fundación Ricardo Pérez y Verdes viene de ampliar su patrimonio lúdico con nuevas piezas de colección para su Museo Etnolúdico de Galicia (MELGA), aprovechando el enclaustramiento de este etapa que nos toca vivir con el COVID-19, revisando a través de las redes sociales, en la búsqueda permanente de material para engrandecer, si cabe, nuestras vitrinas expositivas.
En esta ocasión la “joya”, ha sido adquirida en un anticuario de Pontevedra, es un raro y antiguo ajedrez hindú de principios de siglo XX (1918) en madera de ébano y sándalo con incrustaciones de marfil, con todas las figuras talladas a mano y un tablero precioso de taracea. Son en total 32 fichas, 16 negras y 16 blancas. Cuenta con 8 peones, 2 elefantes, 2 visires del Rey, 1 Rey y 1 Consejero o Alferza.
La hipótesis que se apoyan esta teoría de este ajedrez, se basan en un juego propio del país hindú, llamado Chaturanga, del que se insinúa que este parece derivar. La leyenda tiene varias versiones y también varias fechas: como el 3.000 a.C., el siglo III a.C. y el siglo V y la sitúa en la India. La leyenda la situamos con un rey hindú, llamado Ladava, había perdido en una batalla a su hijo Ajamir, el cual había fallecido durante la refriega al sacrificarse para que su ejército lograse la victoria. El Rey, ante tan dura pérdida, cayó en una profunda amargura de la que nada ni nadie conseguía hacerle salir. Un día, un modesto brahmán llamado Latur Sissa consiguió audiencia del monarca con el objeto de tratar de poner fin a su melancolía. Al Rey le entusiasmó el juego y éste se convirtió en su pasatiempo favorito. Pronto no tuvo rival que le venciese y pudo ir olvidando la pérdida de su hijo.
En un anticuario coruñés, hemos localizado unas marionetas del mundo asiático ( China, India, Indonesia, etc…), que corresponde al teatro de sombras o marionetas de sombra, estas poseen connotaciones mágicas, despertando los sueños, el subconsciente, el espíritu, que representan epopeyas del pueblo. En Indonesia, como estas, se denominan Wayang Kulit, figuras planas y decoradas en piel y madera, que proyectan una sombra sobre la pantalla que simboliza el universo. Wayang siginfica teatro y Kulit sombra o imaginación. Las otras denominadas Wayang golet, no son de sombras, son muñecos tridimensionales con varillas o cañas y se presentan directamente al público sin telón. También son de principios de siglo, sobre los años 40 aproximadamente.
Todas estas adquisiciones ya se encuentran en las vitrinas del MELGA en el apartado de los pueblos antiguos de Asia. Quedan todos invitados a presenciarlas.
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