Se afianza con éxito rotundo la VII Ruta de Biciclásicas de Ponteceso

La edición séptima de la Ruta de Bicicletas Clásicas de Ponteceso, celebrada ayer domingo día 11 del presente mes de setiembre, por la villa de Eduardo Pondal, se puede decir que es el gran espaldarazo y consolidación, que la gente de Galicia nos ha dado a la Fundación Ricardo Pérez y Verdes y al Museo Etnolúdico de Galicia (MELGA) como organizadores de este magno evento.

Hemos logrado batir la marca de asistentes, desde el inicio de la primera ruta realizada allá por el año 2014, con una participación de cerca de 40 “chalados ciclistas” y 6 niños y niñas entre los 5 y los 8 años de edad,  que con sus cuidadosas y brillantes bicicletas clásicas y sus atuendos de época, pasearon por la villa pontecesana dando un colorido especial al ambiente festivo. Como todos los años la Ruta está encajada en la programación general de las Fiestas de la Barquiña, incluidos dentro del Ponteclásico. La organización corrió a cargo de la Asociación de Eventos de Ponteceso, de la Fundación y el MELGA, con la colaboración inestimable del ayuntamiento de Ponteceso.

La procedencia de los ruteros pertenecían en su mayoría a la Provincia de A Coruña (Pontedeume, Arteixo, Carballo, Vimianzo, Oleiros, A Coruña y Ferrol), de Castilla-León (Ponferrada-El Bierzo) y como novedad este año hicieron su presencia dos parejas de la provincia de Pontevedra (Vigo). Por fín, esta año contamos con participación del ayuntamiento de Ponteceso, dos jóvenes pontecesanos como Salvador Andrade, hijo del campeonísimo de tirabalas Carlos Andrade policía local, con una bicicleta de su bisabuelo marca  y de Aaron García  que llevaba “muy feliz” una Derby Panter antigua recién adquirida.

 

La concentración del grupo se llevó a cabo en el Centro Cultural a las 11,30 h. y hacia las 12,30 h. la comitiva  acometió el paseo fluvial, recorriendo la Trabe, el Malecón, la Barra y regresando por el mismo lugar hacia la plaza del Relleno en donde todas las bicis fueron expuestas al lado del río Anllóns. Como novedad de este año, al lado de la exposición de biciclásicas, todas ellas con un número identificativo, se colocó una urna, para así facilitar a las personas que se encontraban en la carpa de la fiesta,  pudieran observar con detenimiento las mismas y así  poder ejercer con su voto  las tres bicis que mas le hubieran gustado.

Todo el grupo de biciclásicas, durante la sesión vermut, acompañados de la música de la Orquesta MAGOS, degustó en un opíparo almuerzo a orillas del Anllóns, no faltando como años anteriores la empanada, los exquisitos callos, los queiques, el queso, el membrillo,etc. y todo ello bañados con los vinos caseros aportados por varios participantes. En los postres, una vez escrutados todas las papeletas, que fueron muchas, se hizo entrega de los TRES trofeos a las bicicletas clásicas mejor valoradas y presentados este año como novedad de la ruta. Las máquinas vencedoras y merecedores de ellos fueron: primeramente para la “bicicleta mejor restaurada” para la número 11, una Orbea del año 1950, fabricada en España y conducida por el carballés Carlos Riveiro; para la “bicicleta mas original”, con el número 8, se la llevó un tamdem holandés de 1985 conducida por los oleirenses Noelia Mariñas y Julián Bokser y el último premio fue para “bicicleta más antigua”, una Orbea Ciclos Eibar  de Serafín Ures de Pazos (Ponteceso)), con el número 13, que seencuentra  expuesta en el Museo Etnolúdico de Galicia (MELGA)  y que la porta y conduce, en todas las rutas clásicas de la península Ibérica, nuestro director Ricardo Pérez y Verdes.

 A todos los participantes se les hizo entrega de unas bolsas con diferentes recuerdos por parte del ayuntamiento de Ponteceso, la Asociación de Eventos hizo entrega de una camiseta de Ponteclásico,  la Fundación y el MELGA aportaron un pin de madera con el logo de una bicicleta antigua, así como el cartel anunciador de la jornada y la cartela conmemorativa de la VII Ruta de Bicicletas clásicas para colocar en cada una de las bicicletas presentadas.

Se consolida y se afianza esta actividad tan vistosa como cita anual en Ponteceso, pues ya se piensa en la próxima edición, ya que se intentará  subir el listón un poquito mas y conseguir el medio centenar de participantes. Seguro que se consigue, ya que este año hemos tenido alguna baja importante por problemas de actividad laboral que no pudieron acompañarnos, sino estaríamos comunicando un nuevo record de asistentes. Deseamos que se consiga, ya que nuestra ruta, hasta el momento es la mas numerosa de todas las que se realizan en Galicia y  ojalá que algún día podamos estar a la altura de nuestra vecina ciudad portuguesa de Esposende que llegan a alcanzar los trescientos participantes, venidos de varios países europeos, entre ellos España, Francia e Italia. Todo se andará y esperamos que pronto llegue, aunque no nos podemos quejar, pues en casi nueve años y siete rutas hasta la fecha,  tenemos una cota de participación muy importante.

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