Por primera vez, en la historia del Museo Etnolúdico de Galicia (MELGA), ubicado en el municipio de Ponteceso, en el edificio municipal del Centro Cultural, recibió en el día de hoy 21 de julio-23 en sesión matinal, a un grupo de una veintena de jóvenes, entre los 11 y los 14 años de edad, que venían acompañados por el coordinador de la actividad José Luís Sobrino, del ayuntamiento coruñés de Betanzos. Para todos ellos, aunque lo conocían por las redes sociales, su “bautismo” museístico pontecesano.
Entre las actividades lúdico-culturales que tiene programadas durante el verano las concejalías anteriormente dichas, promociona a través del “Campus Ayuntamiento de Betanzos”, actividades paralelas de conocimientos de otras materias, no siempre van a ser solo deportivas, para el disfrute de unas merecidas vacaciones estivales de forma más recreativa. En esta ocasión, dentro de su programa de visitas guiadas, se encontraba seleccionada, aunque se habían programada en otras ocasiones sin éxito, su asistencia a nuestro museo. ¡Dicho y hecho, este año se consiguió¡
Aunque con grupo algo heterogéneo, poco disponible para la visita, alumnos/as de diversos centros escolares, pero en cambio con un grupo ideal, las dos horas y cuarto consumidas, les supieron a poco. El recorrido se completó pero con muchas actividades sin desarrollar, y aunque lo intentaron no fue posible batir ningún record sobre los juegos diseñados para tal ocasión. Al llegar al final de la visita guiada en un empate, los premios de la Fundación Ricardo Pérez y Verdes y el MELGA, suelen conceder a los alumnas/os aventajados en dar soluciones a las preguntas efectuados por el guía-director, merecidamente los vencedores fueron Xabier Pedreira y Sergio Abrodos de 12 y 13 años de edad respectivamente.
Como curiosidades de la sesión hemos tenido visitas libres (por su cuenta), de turistas de varias comunidades autónomas, un político gallego y familia, dos coleccionistas que al final de la visita todos firmaron en el libro de visitas del museo, apuntando las excelencias de este “grande” museo del juego y del deporte. Otra de las curiosidades fue que este mismo grupo, el año pasado habían visitado el Museo del video-juego, ubicado en el municipio pontevedrés de Cangas del Morrazo, comunicando (aunque las comparaciones son odiosas) que les había entusiasmado más el MELGA que el del video-juego. Seguro que como les dijo nuestro director, estáis más acostumbrados a la tecnología que practican diariamente, que a los juegos y deportes tradicionales que os resultaban más ajenos a sus vidas cotidianas. ¡Una jornada veraniega distinta y muy recreativa!
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