Otro año más, las carretas, los carros y las carrilanas descendieron velozmente, por el circuito del Campo de la Feira de Ponteceso

Después de una tarde intranquila, por parte de la organización del evento, ya que el tiempo no era el deseable, ninguna inscripción (costumbre inadecuada de muchos participantes) y muy pocos espectadores, la suspensión hubiera sido lo adecuado para estos casos, pero sobre las 17,30 h. (hora de comienzo de la Baixada), comenzaron, sorpresivamente, a fluir de las calles de la Trabe, una afluencia de público importante y varios niños, jóvenes y adultos deseosos  en participar e inscribirse “in situ” para la alta competición de vehículos de madera, en su cuarta edición de este año 2017. Al final fueron un total de una veintena de “pilotos” se prepararon para tomar sus “bólidos” y competir en el velocísimo circuito del Campo de la Feria. En esta ocasión no contamos con ninguna participación femenina, aunque por parte de los organizadores se les insistió en varias ocasiones a realizar algún descenso, aunque solo fuera fuera de competición. Los participantes contaban entre los 10 años y 75 años.

Como todos los años dio el pistoletazo de salida de las pruebas, el director del MELGA, que realizó su anual bajada en su carreta (bicicleta), dando a continuación la inauguración de la gran competición oficial. Después de una bajadas de calentamiento para adaptarse y conocer el circuito, las carretas (piloto individual) dieron la salida a la competición de velocidad.  Por parte de la organización la competición de resistencia que había programada al final fue desestimada por problemas de circuito no adecuado. Se realizaron tres descensos cada competidor y se anotó el mejor tiempo efectuado para su clasificación final. Le siguieron las carrilanas ( por parejas o individual) con el mismo sistema que el anterior y finalmente la estrella del circuito, los carros o coches (conducidos por tres o cuatro participantes), que hicieron el deleite del mucho público asistente, obteniendo en varias ocasiones enormes aplausos por las pericias de los pilotos, que en algunos momentos, se pudieron conseguir cerca de los 40 kilómetros por hora, pues la cuesta del descenso tiene una pendiente aproximada de unos 18 %.

Después de algunos raspaduras en brazos, caras, rodillas y alguna costalada, se hizo la entrega de trofeos a los participantes, cuyos resultados fueron los siguientes:  en la modalidad de Carretas el trofeo de campeón fue para Lucas Rey con un tiempo de 12,10 segundos,; el subcampeón fue para Adrian Ordoñez con 12,30 segundos y tercer clasificado para Anxo Ordoñez con 18,30 segundos. Para  el campeón de las Carrilanas, como el año anterior, fue para Adrián Ures con un tiempo de 13,90 segundos; el subcampeonato para Benigno Castro con 14,80 segundos y tercer clasificado para Victor Conizas con 15,75 segundos. Y finalmente los grandes vencedores de los carros fueron para el equipo “Quiles” formado por Jorge Cerdeiro, David Ribera y Nino Castro, que batieron el record del descenso con una marca extraordinaria de 11,40 segundos, mejorando en cada ocasión los 14,07 segundos y los 12,35 segundos hasta llegar al tiempo antes dicho. El segundo puesto fue para el equipo de Eliseo Pose, Sergio Musi y Casiano López con un tiempo de 13,50 segundos y el tercer puesto para el equipo de Adrián Ures, Fran Cotelo y Jonathan Cousillas.

Una gran jornada que en principio no era muy halagüeña ni satisfactoria, pero que al final brilló tanto por los espectadores como por los habilidosos participantes. La organización y todos los allí presentes desearon, sin dudarlo, que la quinta edición será memorable. Así lo deseamos. Entonces… solo nos queda preparar, desde ahora mismo, vuestras carretas, carros y carrilanas para V Bajada del 2018.