Un mes de julio espectacular de visitas al Melga de Ponteceso y un comienzo de agosto por la misma senda

Podemos considerar, sin error a equivocarnos, que este verano de 2018 puede ser uno de los más importantes en cuanto a visitantes particulares ha recibido el Museo Etnolúdico de Galicia (MELGA), desde su inauguración oficial del mismo, allá por el año 2013. Con ello, no solo nos estamos refiriendo a este apartado exclusivamente, sino también a las visitas guiadas de grupos de campamentos, de empresas, familias y de amigos. Creemos que el boca-boca está funcionando a la perfección, pues muchos de las personas que nos visitan nos comentan que la cita fue a través de ellos, por internet y sobre todo por los niños que ya han venido con sus centros docentes y regresan de nuevo con sus padres y amigos.

Este  primer sábado de mes de agosto (día 4), el museo se vio desbordado por la cantidad de personas que dejaron un momento las arenas de la playa para desplazarse con sus allegados más cercanos para realizar la visita, según ellos pendiente y prometida desde hacía tiempo. También tuvimos a un grupo, que había solicitado con casi un mes de anticipación, una visita guiada desde las 11,00 h. hasta las 14,00 h. que sus miembros pertenecían a directores de varios institutos de secundaria  y a personal de la Universidad, todos ellos de la ciudad de A Coruña. A estos, se unieron varios matrimonios con sus vástagos, procedentes de la comunidad de Extremadura y de Madrid.

Es interesante observar que, día a día que pasa, el MELGA tiene más seguidores y un reconocimiento por muchas gentes de este país, que creen que Ponteceso, cuna de Eduardo Pondal, posee un gran activo más y una cita indispensable y “obligada”, que no deben dejar de conocer, tanto por la mayoría de los peques y por muchos mayores, dentro de los posibles jornadas programadas de vacaciones por la Costa de la Muerte y que se acerquen por la comarca de Bergantiños.